Pintando un cumpleaños de morado

¡¡¡Hola!!! Os enseño una de las últimas cosillas que he hecho, que ha sido un reto, una ilusión y un agradecimiento convertido en lo que espero sea un bonito regalo de cumpleaños, porque el hecho de que alguien se acuerde de tus creaciones para regalar es un halago. 

Pues bien, me explico. Me pidieron un regalo de cumpleaños y aunque costó que quien me hiciera el encargo se decidiera, finalmente dimos con la manualidad idónea. Y a ello dejó que, por mi cuenta y riesgo, añadiera lo que quisiera para completar el regalo. 

Así, lo elegido fue una funda para una tablet, y a pesar de que no pude encontrar la goma eva exacta que me pidieron, pude comprar una similar y que igualmente me parece muy simpática, morada con unos motivos pequeños en blanco. 

Goma eva.

Una vez realizada la funda, para la que tomé las medidas, una  vez que me dieron el modelo, al buscarlas en internet, y al cerciorarme de que todos los lados estaban bien pegados, con silicona líquida, me dispuse a decorarla e igualmente siguiendo los gustos de quien me la encargó, me decidí por una flor con una mariquita y una mariposa, ambos detalles en color morado, resaltando con el tono algo más claro de la goma eva. El cierre en esta ocasión es normal, en vez de en forma de asa. 

La flor-detalle.

La mariposa frontal.

La funda de tablet.

Y para que todo el regalo fuera un conjunto, se me ocurrió hacer un broche con forma de corazón en morado, y una pasada con dos pequeños corazones en el mismo tono. 

El broche-corazón.

La pasada.

Y finalmente no hay cumpleaños sin tarjeta de felicitación, así que echadle un vistazo a ésta. He de decir de antemano que estoy encantada con una perforadora esquinera que compré en Zaragoza, en Larraz, porque ahora mis tarjetas quedan más chulas, por lo menos para mi gusto. Y para no perder la tonalidad de todo el regalo, la hice en morada, combinándola con blanco, utilizando una cartulina que corté con mis tijeras de formas. Y por dentro lleva un poco de washi tape de color morado y blondas. Y el remate final, otra flor de color morado. El sobre va combinado igualmente cn el washi tape y en la parte trasera lleva dos pequeñas libélulas conseguidas con la perforadora que también compré en Zaragoza hace una semana.

La tarjeta-felicitación.

Y ya os muestro el resultado más que final, que espero que guste...

Y el regalo completo.